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Descubre rincones desconocidos en la Sierra Norte de Madrid
Entre los 42 municipios que conforman la Sierra Norte de Madrid se encuentras los menos poblados de toda la Comunidad de Madrid. Pequeños municipios donde recordar las tradiciones y formas de vida del pasado y recorrer paisajes donde la ruralidad y la naturaleza destacan por su pureza. ¿Quieres conocer alguno de los pueblos desconocidos de Madrid? Acércate a la Sierra Norte de Madrid.
En estos cuatro pueblos encontrarás la tranquilidad del mundo rural
Robledillo de la Jara se encuentra a 80 km de la capital y es uno de los pueblos con menos habitantes de la Comunidad de Madrid con apenas 97 habitantes (INE 2021). La villa fue fundada en torno al siglo XII, por ganaderos segovianos que se asentaron en esta zona por su proximidad a Buitrago en las estribaciones de los Cerros de la Mujer Muerta en pleno Valle Bajo del Lozoya. En el casco urbano se encuentra la Iglesia de San Pedro Apóstol, reconstruida en el siglo XIX, además de otros monumentos como un potro de herrar y un antiguo pozo.
Desde el municipio salen varias turas para senderistas y cicloturistas, como la que une Robledillo y Puebla de la Sierra, siguiendo en algunos tramos antiguas vías pecuarias. Una de ellas es la Senda del Genaro (GR 300), una ruta de 70 km de longitud que discurre en el entorno que rodea el embalse del Atazar. La Red Local Robledillo de la Jara incluye dos sendas lineales, una que conduce hacia la presa de El Villar, construida en el siglo XIX que sigue funcionando a pleno rendimiento y la otra hacia el paraje de Valdehierro y una ruta circular, la senda del Santo Roto que pasa por los restos de la Ermita del Villar, la iglesia del antiguo poblado que allí se asentaba, desaparecido hacia el siglo XVI.
En el entorno veremos que se cultivan algunos pequeños huertos, rodeados de un paisaje formado por monte bajo, jara y retamas con romero y muchas otras plantas aromáticas, en donde disfrutarás en primavera del aroma de una infinidad de flores, gracias a las cuales se produce la rica miel de Robledillo de la Jara. El Jabardo SAT os ofrece le la posibilidad de conocer de primera mano los secretos de un oficio tradicional ya escaso: la apicultura, en una actividad que realiza en colaboración con el Centro de Innovación Turística de la Sierra Norte «Villa San Roque» los sábados (más información sobre la misma en este enlace).
Redueña pertenece a la zona denominada al Valle del Jarama. Emplazada en una zona de valles encajados con amplios terrenos de labor. De las canteras de este municipio salió gran parte de la piedra con la que se construyeron monumentos tan importantes y tan castizos como la Fuente de Cibeles, El Castillo de Manzanares, La Fuente de Neptuno o La Presa del Pontón de la Oliva.
Algunas de sus construcciones más interesantes son la Iglesia de San Pedro Advíncula, de estilos renacentista y barroco, construida entre los siglos XIV y XV, el Potro de Herrar, recientemente restaurado, constituido por cuatro postes verticales de piedra en los que se amarraba y se herraba a los animales, y su Cruz Gótica, localizada en el antiguo cementerio. El trazado urbano apenas ha sufrido variaciones desde el siglo XIX y en su interior aún se conservan algunas viviendas tradicionales y conjuntos agropecuarios.
De especial interés encontramos una senda accesible en el interior del bosque mediterráneo. La “Senda para Todos”, un recorrido lineal de 2.2 km y con escaso desnivel que permite el acceso a personas con movilidad reducida o en silla de ruedas. Los paneles interpretativos están adaptados en braille para personas invidentes, así como con volúmenes en relieve para conocer la gran riqueza medioambiental. Durante su recorrido se pretende que el visitante se aproxime a uno de los paisajes más característicos de Redueña, la dehesa, y conozca la evolución del paisaje, la flora y fauna de este entorno, así como las redes y conexiones que se crean en este ecosistema.
Somosierra es un municipio emplazado en el Valle Medio del Lozoya, a 93 kilómetros de la capital. Se encuentra en el paso natural entre la Comunidad de Madrid y Castilla y León y posee las características propias de la alta montaña. En Somosierra se encuentra la Dehesa Boyal o Dehesa Bonita, uno de los bosques mixtos más destacados de la Naturaleza de la Sierra Norte, donde podrás encontrar en tu camino al ganado vacuno pastando. Puedes recorrerla a través de una sencilla ruta de menos de 5 km.
En este mismo entorno se encuentra la Chorrera de los Litueros, una de las cascadas más bonitas de la Comunidad de Madrid y en las laderas del pico Tres Provincias nace el río Duratón creando un barranco espectacular que trae a los más aventureros a practicar el barranquismo. Consulta aquí para hacer la actividad siempre con la ayuda de un guía profesional.
Su situación estratégica hace que haya albergado algunos conflictos bélicos como la batalla de Somosierra, el 30 de noviembre de 1808, durante la Guerra de la Independencia donde se enfrentaron el ejército español y francés y que representó una gran victoria para los franceses, ya que supuso la apertura del camino hacia Madrid. Durante la Guerra Civil Española, volvió a sufrir el paso de las tropas de ambos bandos debido a que era el único paso viable que tenían las tropas nacionales desde el norte hacia Madrid
Los dos edificios significativos de arquitectura religiosa de Somosierra son la Ermita de Nuestra Señora de la Soledad (siglo XVII) y la Iglesia Parroquial de Santa María de las Nieves (siglo XVIII).
Villavieja del Lozoya se encuentra a 79 km de la capital en el Valle Medio del Lozoya. Se sitúa en la margen izquierda del río y se extiende por un cerro en el territorio accidentado de los Montes Carpetanos a orillas del río Sequillo. En origen debió de tratarse de un poblamiento estacional, vinculado al aprovechamiento de los pastos. Esto coincide con la importancia que tuvieron en la economía municipal la trashumancia y la ganadería, con diez vías pecuarias que atravesaban el pueblo.
Una peculiaridad en la arquitectura de Villavieja del Lozoya es que alberga un arco mudéjar, único en la Sierra Norte de Madrid. Ubicado en las ruinas de una antigua vivienda, este arco de herradura y ladrillo rojo es el vestigio más antiguo del municipio, datando de los siglos XIII-XIV. En la actualidad está restaurado y forma parte de una hospedería. En las proximidades del núcleo urbano es posible observar los restos de la espadaña de la ermita medieval de la Trinidad, en dirección a Buitrago.
En Villavieja del Lozoya puedes conocer los oficios tradicionales en el antiguo lavadero donde las mujeres antiguamente iban a lavar y encontraban su lugar de reunión y que hoy su uso es museográfico, fundamentalmente educativo, y se abre periódicamente. Y la Fragua, en la que antaño se arreglaban los utensilios de arado, las herraduras del ganado, etc. Actualmente el Museo La Fragua se encuentra en la antigua herrería y recoge los objetos ligados a este oficio.
Los paisajes en torno a Villavieja del Lozoya se pueden recorrer a través de su Red Local que está compuesta por cuatro itinerarios, nos ofrece distintas opciones.
Y si queréis conocer otros planes o necesitáis ideas para disfrutar de nuestro territorio en vuestras visitas, en nuestra página web podéis consultar todas las propuestas.
No olvides planificar tu viaje con antelación, reservar las actividades e informarte bien de todo lo necesario, y disfrutar de la compañía de los tuyos en uno de los alojamientos rurales de la Sierra Norte de Madrid para descansar y recargar fuerzas. ¡Lugares que te sorprenderán!
Recuerda siempre que debemos actuar de manera responsable, respetando la naturaleza y minimizando nuestro impacto en el medio ambiente. Y debemos proteger sus valores favoreciendo el desarrollo socioeconómico de la población local.
¡Te esperamos!
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