En el extremo sur de la Comarca, sobre terrenos suaves y ondulados en lo que se considera la rampa de la Sierra Madrileña, se encuentra el municipio de Navalafuente. Al fondo del término se divisan las montañas de la Sierra de la Morcuera y las estribaciones de la Sierra de La Cabrera. Su paisaje vegetal se compone de prados y dehesas de encinas y de robles.

Las primeras viviendas de Navalafuente las levantaron pastores alrededor de la fuente que nutría la Nava, dándole nombre al territorio. Durante la Edad Media el pueblo de Navalafuente perteneció al término de Bustarviejo y, por lo tanto, también al Sexmo de Lozoya (Segovia). No fue hasta 1650 que, mediante un privilegio Real, se exime del gobierno de Segovia, y casi cien años más tarde alcanzó el rango de villa independiente de Bustarviejo. Bustarviejo deja de pertenecer a Segovia en 1833, cuando pasa a jurisdicción de la provincia de Madrid.

Por el término discurre un arroyuelo denominado Gargüeña que nace en las inmediaciones del término de Bustarviejo y se junta con el arroyo de Guadalix a escasa distancia de esta población.

Entre la plaza de San Bartolomé y la plaza de la Iglesia, se encuentra la plaza de la Fuente, que cuenta con árboles centenarios que dan sombra a una fuente de finas aguas, de la que se abastecían los vecinos para su uso ordinario hasta no hace mucho tiempo y que, según la tradición, es el origen del pueblo de Navalafuente.

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